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Uno de los mayores retos de conectividad del Estado colombiano es la conectividad de la Red de Bibliotecas Públicas del país, que incluye más de 1.400 bibliotecas repartidas por los municipios. La tarea no es simplemente ofrecer internet. Conectar las bibliotecas significa abrir ventanas culturales inimaginables, por ejemplo: se ha podido capacitar a los bibliotecarios, acceder a documentos digitales, compartir catálogos de libros e incentivar nuevas formas del comportamiento lector.

La responsabilidad de fomentar la lectura y el conocimiento a través de garantizar la conectividad en las bibliotecas, es una tarea compartida entre las entes territoriales, el Ministerio de Cultura y del Ministerio TIC.

La Biblioteca Nacional tiene la meta de conectar las 605 bibliotecas que aún permanecen desconectadas. Este reto inició en 2013 y para agosto de 2015 se han conectado 415 bibliotecas. El objetivo es que en 2018 las 605 bibliotecas cuenten con internet y además empiecen a comunicarse entre ellas.

Quienes están detrás de la gestión de este gran proyecto son: Milena Sandoval, coordinadora de Sistemas e informática del Ministerio de Cultura; Patricia Rodríguez, coordinadora de Procesos Organizacionales de la Biblioteca Nacional y Jorge Iván Vergara, líder de conectividad de la Biblioteca.

Hablamos con ellos para que nos contaran sus experiencias al pensar en el proyecto de conectar las bibliotecas del país:

¿Cómo conocieron los Acuerdos Marco?

Milena Sandoval: "los conocí a través de los CIO-Summit y durante el seminario del Inalde al que fue la "Paca" Zuleta y nos explicó lo que serían los primeros Acuerdos".

Patricia Rodríguez: "tuvimos una reunión estratégica con MinTIC y exploramos todas las alternativas posibles para la conectividad de la Red Nacional de Bibliotecas, que es un proyecto prioritario del Ministerio de Cultura. Ya teníamos un contrato andando el año pasado, pero debíamos pensar el de este año. Allí nos aconsejaron hablar con Colombia Compra Eficiente, tuvimos una reunión con María Margarita Zuleta en la que ella analizó lo que necesitábamos y cómo el Acuerdo Marco era perfecto para lo que estábamos buscando".

¿Qué implica conectar 1.400 bibliotecas en el país?

Rodríguez explica que "una de las principales responsabilidades de la Biblioteca Nacional es ser la cabeza de la Red, de acuerdo con lo establecido por la Ley 1379 de 2010. Es la Biblioteca quien debe garantizar que lleguen a la región todas las políticas y los planteamientos en términos de lectura. Todo esto enmarcado en el propósito estratégico del Gobierno de incrementar el índice de lectura de los colombianos, de 1,9 libros leídos por año a 3,2.

En el marco de este gran objetivo se buscaron alternativas que pusieran al alcance de los colombianos más contenidos con el fin de estimular los hábitos de lectura. Y sobre esa base se concluyó que era fundamental garantizar el acceso a internet en las bibliotecas públicas de la Red".

Jorge Vergara confirma que "al inicio de todo el proyecto teníamos conectadas 279 bibliotecas a través de un contratista público. Una vez iniciamos el Acuerdo Marco de Precios lo que buscábamos era aumentar esa cantidad. Con Colombia Compra Eficiente logramos un mayor alcance de conectividad para el cuatrienio con mejores tarifas".

¿Qué periodo contrataron entonces?

Rodríguez: "Queríamos un solo contrato para el cuatrienio pero solo nos fueron autorizadas las vigencias futuras a 2016, firmamos el contrato con la Unión Temporal Colombia Compra Eficiente - Azteca - S3Wireless hasta diciembre de 2016, sin embargo el propósito y la vocación es rápidamente sacar el siguiente proceso y garantizar que vamos hasta finales de 2018".

Vergara añade que "con este nuevo Acuerdo Marco planeamos la conectividad de 415 bibliotecas, la meta a 2016 es 472 y subir a 523 en 2017 y cerrar con 605 en 2018".

¿Cómo fue el proceso de los AMP para ustedes?

Sandoval: "Al principio fue un poco traumático porque todos estábamos aprendiendo, como clientes nos asustaba tener un mercado monopolizado porque entendíamos que sólo las empresas que quedaran dentro del Acuerdo Marco eran las únicas que podían participar, pero tuvimos la fortuna de tener pluralidad de oferentes y tenemos la posibilidad de escoger entre un universo relativamente uniforme con unos costos muy asequibles y competitivos en el mercado".

¿Lograron ahorrar dinero?

Rodríguez: "cambiamos de servicio porque teníamos un servicio de menor calidad. Ahora tenemos un servicio exclusivo para la conectividad de las bibliotecas y mejoramos. Si bien yo creo que no hubo reducciones efectivas financieramente hablando, sí estamos entregando un mejor servicio".

¿Cómo fue esa mejora del servicio?

Vergara: "nuestro contrato anterior tenía unas velocidades que eran con rehúso. Nosotros salimos de un servicio compartido a uno dedicado, eso se refleja en mejor disponibilidad del canal, incluso hay mejores Acuerdos de Nivel de Servicio con indicadores más exigentes de los que podría lograr con mi contrato anterior, todo esto por cómo fue estructurado el AMP".

Es decir, ¿los Acuerdos Marco sirven?

Rodríguez: "claro y desde el punto de vista operativo ahorra mucha gestión interna, el tener solucionadas las características, las condiciones del servicio, las tipologías, hace el proceso mucho más ágil".

¿Cuáles creen que son las consideraciones políticas de usar los AMP?

Sandoval: "creo que es aceptar una propuesta del Gobierno para el Gobierno, que nos ha convencido de ser una muy buena alternativa. Creo que el proyecto es ganador 100% porque es quitarle esa carga administrativa y contractual que tenía cada uno de los ministerios, para concentrarla en una entidad "central" que seguramente sale más costo eficiente, le pone un estándar a la contratación, hace que en la medida en que estás contratando más pues los precios son mejores".

¿Los AMP son una política de Estado frente al mercado?

Sandoval: "cuando tu revisas las tarifas, sientes que los operadores se han cuidado con las tarifas, pero también siente uno que hay un respaldo en la calidad del servicio y que ellos saben que el incumplimiento de uno de estos contratos no sólo los deja mal con el Ministerio de Cultura sino que los puede sacar a la vuelta de 4 o 5 años de la gestión de contratación. Los efectos son bastante delicados y creo que es una presión chévere porque se siente uno acompañado y no el uno a uno con estos operadores".

¿El Estado se convirtió en un gigante para contratar?

Sandoval: "sí y debe ser así, trae mejores condiciones, la gestión la realiza una sola entidad, recogiendo las necesidades de todos".