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Con el propósito de conmemorar el bicentenario del Colegio de Boyacá, el primer centro educativo de carácter oficial de Colombia, que ha formado a personajes ilustres claves en la construcción de nuestra Nación, y en la formulación de programas en favor de la educación, el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC) lanzó oficialmente la emisión filatélica Conmemoración de los 200 años de servicio del Establecimiento Público Colegio de Boyacá.

En el acto protocolario de matasellado y firma de los sobres de primer día, presidido por el subdirector de Asuntos Postales del MinTIC, Jairo Marulanda y el vicepresidente comercial del Operador Postal Oficial, Carlos De La Rosa, se presentó la serie compuesta por cuatro motivos que representan lugares y símbolos emblemáticos de la ciudad de Tunja, de hechos relevantes no sólo a nivel educativo, sino también en la construcción del Estado Nación. En total serán doce mil (12.000) estampillas las que se pondrán en circulación.

"Para el Ministerio es un honor ser parte de esta celebración que no solo conmemora la relevancia que tiene el Colegio de Boyacá por quienes participaron en su fundación, egresaron de este plantel educativo o tuvieron el privilegio de ser alumnos del mismo, sino también por su representatividad en la educación de los colombianos", señaló Jairo Marulanda, subdirector de Asuntos Postales del MinTIC.

La presente emisión filatélica fue aprobada a través de la resolución 740 del 11 de marzo de 2022 del Ministerio TIC, y autorizó al Operador Postal Oficial de Colombia, que opera bajo la marca 4-72, la producción y comercialización de las estampillas, cada una con un tamaño de 40 x 30 milímetros y un valor facial de 5.000 pesos. Estas podrán ser adquiridas en las oficinas de 4-72, así como en la sala de ventas de filatelia ubicada en las instalaciones del edificio Manuel Murillo Toro, en Bogotá.

Símbolos e imágenes presentes en esta emisión filatélica

• Escudo en madera, fondo sección San Agustín:

La Sección San Agustín fue donde se iniciaron las actividades académicas del Colegio de Boyacá desde su fundación en 1822. Por orden del Gobierno Nacional se asigna el Convento de los Agustinos Calzados de Tunja para el funcionamiento del Colegio. El escudo de madera del Colegio de Boyacá reconstruido en 1963 por el bibliotecólogo de la época, detalla algunas características en la parte inferior derecha, símbolos representativos de las cátedras de filosofía, literatura, ciencia, medicina y artes; y en la inferior izquierda las líneas representan las huellas de sangre que dejaban los abatidos en los escudos de las legiones religiosas.

En la parte superior se encuentran los escudos de Colombia y Tunja, además el año de 1611 como referente en que llegan los jesuitas al Municipio de Tunja; en el medio superior las letras JHS Iesus Hominum Salvator que significa Jesús Salvador de los Hombres. En el centro se encuentra el Obelisco a los héroes del 7 de agosto.

• Interior Sección Central Francisco de Paula Santander:

Esta Sección, ubicada en el centro histórico de Tunja, guarda una historia importante con hechos relevantes no sólo a nivel educativo, también en la construcción de Estado-Nación. Desde 1613, cuando la adquieren los Jesuitas, se establece como el Colegio de esta comunidad religiosa y se inicia la enseñanza de las primeras letras, luego, en 1777, empieza a funcionar el Hospital de Caridad San Juan de Dios hasta el año de 1835 cuando la casa del convento pasó a ser parte del Colegio de Boyacá; esta construcción no pierde su esencia y representa una tradición educativa de más de 400 años.

• Colegio de Boyacá y Torre San Ignacio, 1939:

La foto tomada de los archivos del Banco de la República, libro 'Tunja memoria visual, área cultural'; visualiza la esquina sur occidental de la Plaza de Bolívar de la capital boyacense, donde se encuentra la Sección Central Francisco de Paula Santander, al lado la iglesia San Ignacio terminada a mediados del siglo XVII y al frente la Alcaldía.

• Fachada republicana en piedra, 1914:

En esta fachada en piedra neoclásica republicana se destacan las columnas que enmarcan un pórtico de dos niveles con frisos tallados que le dan un terminado sólido y elegante. Contiene en la parte superior el escudo de Colombia, en el centro un conjunto con acuerpadas pilastras estriadas con cariátides que portan en sus manos pergaminos que simbolizan sabiduría. Estas, a su vez, se encuentran sobre dos figuras de leones, elemento usado en la antigüedad como protector, y capiteles jónicos que son atribuidos a elementos estilísticos de la época.