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Como parte de los actos conmemorativos de los 100 años del fallecimiento de Soledad Acosta de Samper, quien es considerada como una de las figuras femeninas más destacadas en el campo del periodismo, la historia y la literatura del país, el pasado martes 3 de septiembre a las 5:00 de la tarde tuvo lugar el lanzamiento de una estampilla que resalta su legado en la sede del Instituto Caro y Cuervo, con el respaldo del Ministerio de Cultura y el Ministerio de las Tecnologías de la Información y las Telecomunicaciones.

El acto protocolario fue presidido por la Ministra de Cultura Mariana Garcés Córdoba y el Ministro TIC, Diego Molano Vega, en compañía de Jacquin Strouss de Samper en calidad de presidenta del Comité Año soledad Acosta de Samper. Así mismo, al lanzamiento asistieron Adriana Barragán López, presidenta de 4-72, filatelistas y académicos.

Motivo por el cual la jefe nacional de Filatelia de Servicios Postales Nacionales S.A., 4-72, Martha Lucy Giraldo, explica algunas de las razones que motivaron el homenaje así como la importancia que tiene la emisión de este tipo de sellos postales cada vez que se quiere exaltar un acontecimiento o, como en este caso, la figura de una destacada personalidad de la vida nacional.

"Cualquier persona puede acercarse a nuestras oficinas de correo y solicitar que sus cartas lleven la estampilla de Soledad Acosta de Samper, dependiendo del porte del envío, aunque también se pueden adelantar combinaciones en la que por ejemplo el sello postal esté acompañado de la de Rafael Pombo", explica la experta destacando el hecho de que esa sea por ejemplo una de las exigencias de cualquier filatelista.

¿Cuáles son las principales características de esta estampilla conmemorativa?
La estampilla conmemorativa de los 100 años de la muerte de Soledad Acosta de Samper se imprimió con colores especiales a cinco tintas y además cuenta con una tinta invisible que nos proporcionó el impresor en Francia, país que elegimos porque sus estándares de impresión son mucho más avanzados, puesto que aunque en Colombia también se ha avanzado mucho en ese campo todavía resulta mucho más costoso alcanzar los mismos resultados. El perforado característico es mucho más preciso y detallado.

Se emitió un total 10.000 estampillas y estarán a la venta a un costo de $2.500 pesos. Es una emisión relativamente pequeña porque el correo ha dejado de ser monopolio y existen otros sistemas operativos que substituyen la función de la estampilla, de manera que lo más seguro es que se agote muy pronto.

¿Qué es la filatelia?
La filatelia es el arte de coleccionar estampillas y sellos de correo y su origen es producto de la necesidad de avanzar en materia de comunicaciones; de tal suerte que la primera estampilla se imprimió en Inglaterra en 1840 -por iniciativa del empresario y destacado atleta Ronald Hill- porque debido a que como anteriormente quien recibía la correspondencia era quien la pagaba se comenzó a generar un detrimento patrimonial importante en la arcas del Estado, en la medida que si el destinatario no quería recibir esta correspondencia estaba en todo el derecho de negarse a hacerlo.

La reina Victoria recibe de buen agrado la medida y 19 años más tarde Colombia empieza también a emitir y hacer uso de la novedosa estrategia; se trata de unos sellos que en la actualidad cuestan mucho dinero porque se agotaron de manera muy rápida y terminaron en poder de un selecto grupo de coleccionistas, ya que una de las principales características de toda estampilla es que debe decir su procedencia junto con su valor facial -o precio nominal de la estampilla, el cual debe estar impreso en pesos-, no obstante a que para los filatelistas se lo más importante sea el valor intrínseco y el tema.

¿Cuáles son las principales características de una estampilla?
Nuestras estampillas tienen un perforado y tienen una goma al respaldo, de tal manera que debe ser humedecida para fijarla y nunca se le puede poner pegante; además de estar acompañadas por el nombre de la persona que las diseñó, el año en que fueron emitidas, la casa impresora y el dibujo que la ilustra.

¿Qué aspectos se tienen en cuenta a la hora de realizar el dibujo?
El dibujo de una estampilla debe hablar por sí solo y sin necesidad de leer nada. La imagen debe decirle al usuario de qué se trata y en tal sentido para la estampilla conmemorativa de Soledad Acosta de Samper se consideró que se reconociera por la efigie de la destacada humanista.

¿Hay algún tamaño que deba ser tenido en cuenta?, ¿alguna forma en particular a la que deba acogerse la casa impresora?
Hay diferentes tamaños e incluso también hasta estampillas con olores y un sinfín de formas. Sin embargo la Unión Postal Universal (UPU) expide un manual cuyo carácter es en todo caso muy amplio: Colombia por ejemplo tiene una de las estampillas más pequeñas del mundo para conmemorar la importancia del edificio Murillo Toro, sede del Ministerio de las Tecnologías y las Comunicaciones (TIC).

¿Cuál es la estampilla más rara que se conoce?
Cada país tiene su propio criterio para realizar sus estampillas, y por tal razón se pueden encontrar estampillas suntuosas que incluso en Inglaterra llegan a tener piedras preciosas. En Colombia tenemos la de aroma de café -para conmemorar los 50 años de relación con Corea-, dos estampillas en braille, y algunas con imitación de metales preciosos como oro y plata con el fin de conmemorar los recientes logros alcanzados por nuestros medallistas olímpicos.

¿Qué importancia tiene el hecho de que la estampilla sea utilizada en un envío de correo?
Como la estampilla se creó para portear el correo y ese es su principal objetivo, cuando ella ya cumple su misión de llevar una carta pues eso incrementa su valor, en la medida que un sobre de primer día no puede ser considerado como postal.

No obstante hay diferentes tipos de colecciones y mientras unos coleccionan usado y otros nuevos, lo que se recomienda es tener una colección de estampillas que realmente hayan circulado en la red y tengan su correspondiente matasellado.

¿Cuál sería la importancia de la estampilla?
Desde la Oficina de Filatelia de 42 - 72 nosotros estamos promulgando que la gente vuelva a escribir y enviar cartas por correo y la razón es que nada puede remplazar la emoción que se siente cuando uno recibe una carta a veces con tachones o enmendaduras e incluso acompañada de un perfume.
A eso pretendemos volver, porque pese a que gracias a la tecnología tenemos mejores estampillas la verdad es que una carta no puede compararse al correo electrónico o un trino, aparte del hecho que las estampillas también sirven para que aprendamos y son una fuente inagotable de conocimiento que debería comenzar a contemplarse como una estrategia educativa en los colegios.

HACER UNA ESTAMPILLA

¿Cuál es el proceso para hacer una estampilla?
Puesto que en Colombia cualquier ciudadano puede solicitar una emisión filatélica, lo primero que tiene que hacer es dirigirse al Ministerio de Tecnologías de la Información y las Telecomunicaciones (TIC) para que evalúe la importancia de adelantar su emisión, y en tal sentido aunque nosotros recibimos cientos de solicitudes la verdad es que solo se termina imprimiendo un promedio de 20 a 25 estampillas cada año.
Una vez presentada la solicitud, el requerimiento oficial se formula ante el Consejo Filatélico -que es un órgano asesor del Ministerio- para que tras su recomendación se expida una resolución en la que se ordena su impresión y todo el proceso necesario para hacerlo efectivo a cargo de los Servicios Postales Nacionales S.A., 4-72, para la emisión definitiva por mandato gubernamental.

¿Y en lo que respecta a la elaboración de la estampilla en sí misma?
Nuestros diseñadores comienzan a trabar en ese pedacito de papel las características propias de una estampilla: valor facial, nombre del país, además de comenzar a acomodar la imagen de lo que se quiere destacar.
Luego de un sinfín de reuniones en las que se discute el diseño final, aprobado por el Consejo Filatélico y el Ministerio, estudiamos la posibilidad de enviar el diseño bien de enviarlo a Francia o bien de hacerlo con la casa impresora local, que para nuestro caso es Thomas Greg & Sons. Ellos lo montan en unas planchas de metal y comienza el proceso de impresión.

Normalmente nos envían unas pruebas de color y una vez aprobadas se imprime toda la edición para luego adelantar el perforado característico de toda estampilla en forma manual, por medio de unas máquinas que deben ser operadas por una persona debido a que su elaboración exige un trabajo mucho más artesanal.